Efectivos de la Estación de Policía Comunal acudieron en las últimas horas al sector de calles 10 y 35 a partir de un llamado que realizaron vecinos del lugar sobre la presencia de una combi que realizaba maniobras peligrosas.
Al presentarse en la escena, los uniformados advirtieron la circulación del rodado en cuestión y procedieron a solicitar al conductor que se detenga.
Al requerir que bajaran del vehículo, el conductor y su acompañante, de 48 y 32 años, respectivamente, se volvieron violentos contra los agentes llegando incluso a intentar agredirlos.
Tras ser reducidos, se realizó el test de alcoholemia al mayor de los demorados arrojando como resultado 2.28 de alcohol en sangre. Por ello, quedaron a disposición de la Justicia por el delito de ebriedad y desorden en la vía pública.