El Gobierno bonaerense concedió la autorización al Municipio para la instalación de radares a lo largo de la ruta provincial 55.
El anuncio, que fue realizado esta semana a través del boletín oficial, permitirá al Departamento Ejecutivo colocar aparatos para la implementación de controles de tránsito y la consecuente realización de infracciones.
En principio, los puntos donde estarán ubicados los radares son los kilómetros 65,5 y 80,5, donde a través de cinemómetros fijos se fiscalizará la velocidad de los vehículos y la utilización de luces bajas.
Estos dispositivos serán suministrados por la empresa Fluxa, la misma entidad responsable del actual servicio de control de cruces de semáforos y radares en el ejido urbano.