Verónica Borelli habló este martes con MinutoBalcarce minutos después de que una camioneta del Servicio Penitenciario Bonaerense trasladara a Federico Sasso a la Unidad Penal N° 44 de Batán. La madre de Lucía Bernaola celebró la decisión de la Justicia que le revocó la prisión domiciliaria a Sasso, dijo tener «sentimientos encontrados» y sentenció: «estoy contenta por haberle pegado una buena trompada al sistema judicial».

«Fueron tres años durísimos donde pasé de todo. Fueron tres años durante los que esperé que Sasso pise un Penal. Conseguirlo me da cierta paz y tranquilidad, aunque siempre en el fondo de mi corazón sabía que lo iba a ver en la cárcel», aseguró.

Borelli recordó además las irregularidades que giraron en torno a la estadía de Sasso en la Estación de Policía y en el edificio ubicado sobre calle 17. En ese sentido, agradeció el apoyo brindado por la comunidad balcarceña y los medios de comunicación: «sin ellos hubiera sido posible. A todo Balcarce le debo gran parte de esta decisión», sostuvo.

Y agregó: «junto a Maxi (Orsini) logramos que levanten una domiciliaria en plena pandemia mundial, cuando lo normal es que la Justicia libere chorros y violadores. Cumplimos el objetivo porque tengo al mejor abogado del mundo y porque no me detuve ante la mafia, el dinero ni todos los palos en la rueda que me pusieron en todos estos años«.

Consultada por la posibilidad de que la defensa de Sasso presente un recurso extraordinario para no permanecer en una celda del penal de Batán, Borelli fue contundente y cerró: «mi deseo es que termine de cumplir su condena ahí. Pero entiendo que existe la posibilidad de que se enferme o se sienta amenazado, como ya ocurrió cuando el dieron la domiciliaria. Pase lo que pase, logré cumplir lo que le prometí a Lucía y es que Sasso esté en la cárcel».