La hermana de la víctima denunció al atacante en las redes sociales. El brutal hecho ocurrió en un local bailable de Quilmes.
Un brutal episodio de violencia ocurrió en un boliche de la localidad bonaerense de Quilmes. Un joven de 18 años fue salvajemente golpeado por un rugbier al que chocó sin querer en el local bailable.
El episodio ocurrió el sábado por la noche, pero se conoció en las últimas horas. Mauro Ovadilla fue con sus amigos a despedir el año a un boliche de dicha localidad y en un momento de la noche se chocó accidentalmente con otro joven. El pedido de disculpas no bastó para evitar que el agresor le propinara una brutal golpiza.
El atacante, identificado como Gonzalo Miño, es un jugador de rugby que asiste a la misma escuela que la víctima, aunque solo se conocían de vista. “No es la primera vez que este pibe le pega a alguien. Necesitamos justicia para que no vuelva a arruinarle la vida a nadie más. Mi hermano va a quedar con las secuelas en su cara para toda la vida”, dijo a Crónica Milagros, hermana de chico golpeado.
De acuerdo a lo que contó la joven, su hermano no tuvo ninguna oportunidad de defenderse. Cuando se topó con Gonzalo solo alcanzó a pedirle “disculpas por haberlo chocado en el tumulto de gente” y empezaron los golpes.
Como consecuencia de la brutal golpiza, a Mauro se le rompieron los anteojos que tenía puestos y los vidrios le provocaron
Mauro llevaba puestos sus lentes cuando fue atacado y como consecuencia de las trompadas que recibió, los vidrios le provocaron “un corte en el ojo izquierdo” y “lesiones en la córnea”. Además, le partió un diente.
La joven compartió una publicación en la red social Facebook para escrachar al agresor, junto a varias fotos de su hermano después de la golpiza.
Tras el ataque, el agresor “estuvo demorado unas horas y lo soltaron, aunque tiene 18 años. Tiene una banda de amigos que patotean a todos y la mayoría le tiene miedo”, aseguró Milagros.
