Los operativos de control en la vía pública durante enero pasado arrojaron un saldo de 351 motos secuestradas, informaron fuentes oficiales. Según supo este medio, más de 100 de esos rodados no fueron reclamados por sus dueños y serán compactadas en los próximos días.
A su vez, según datos revelados a este medio, en febrero se secuestraron 700 motos durante los distintos operativos de control realizados en la ciudad.
La compactación de vehículos tiene fines benéficos ya que lo recaudado se destina íntegramente a la Fundación Hospital Materno Infantil Victorio Tetamanti (Fundami).
Esta directiva supone tres beneficios: mejorar la operatividad de las playas de secuestro, las condiciones de trabajo de los inspectores de tránsito y la ayuda al nosocomio.
«La compactación de estos vehículos abandonados nos permite priorizar la seguridad de los vecinos, cuidar el ambiente, y ayudar a quienes más lo necesitan», resumió el intendente Guillermo Montenegro en sus redes sociales tras uno de estos operativos.
Recientemente se propuso poner topes a los montos que se cobran para recuperar estos vehículos pero las iniciativas de los concejales del Frente de Todos no prosperaron.