Didier Raoult está convencido de que la hidroxicloroquina es el remedio contra el virus, aunque referentes de la política sanitaria siguen cuestionándolo.
Didier Raoult, un infectólogo francés, afirmó hace un tiempo que había encontrado la cura para enfrentar al coronavirus. Sin embargo, este no tuvo todo el apoyo.
Este especialista indicó que la hidroxicloroquina era el remedio definitivo para el Covid-19, y que no aplicar su uso “es inmoral”.
Pero el cuestionamiento de la comunidad científica francesa es cada vez más grande, a pesar de que este médico lleva coleccionando virus desde que era muy pequeño, cuando estudió la teoría de la evolución junto a su padre.
Al igual que en países como Italia, en donde la división entre el norte y el sur es muy fuerte, lo mismo ocurre con este hombre y el norte del país: la agencia de salud PACA, en el sur, respeta a este médico “rebelde” y ya adoptó algunos de sus tratamientos.
Principales críticas por esta “vacuna contra el coronavirus”
Científicos de París aseguran que el tratamiento probado sobre 24 pacientes no fue suficientemente testeado durante la pandemia, y Raoult afirma que el país no tiene un plan concreto para enfrentar a esta crisis.
Uno de los cuestionamientos más grandes provienen de la ex ministra de salud y candidata a las elecciones municipales en París, Agnes Buzyn, y su marido Yves Levy.
Levy, patrón del Instituto Nacional de Investigación en Salud y Medicina (INSERM) entre 2014 y 2018, le retiró la “labelización” en 2018 a Infection Mediterranée, Instituto creador por Raoult.
Y mientras este infectólogo sigue afirmando que la cloroquina es la salvación, otros la califican como “vevenosa”.
“Después de seis días, el 70% de los pacientes tratados con hidroxicloroquina no tienen más carga viral en sus test rinofaríngeos”, expresó Raoult.
