Un delincuente fue reducido por un vecino en una vivienda de calle 7 entre 20 y 22. Sorprendido, el ladrón intentó escapar pero terminó detenido.
En la madrugada de este martes un perro se convirtió en una pieza fundamental para evitar un asalto. Un delincuente de 19 años intentó ingresar a una vivienda ubicada en calle 7 entre 20 y 22 pero se encontró con la mascota de la casa, que advirtió la presencia del sujeto y comenzó a ladrar.
La dueña de la propiedad, alertada por el animal, llamó a Emergencias y a su expareja, quien se encontraba cerca del lugar y acudió rápidamente. Sorprendido, el ladrón intentó escapar pero terminó encerrado en el baño y detenido por los efectivos que, minutos más tarde, arribaron al lugar.
