El candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio apuntó contra el sacerdote. «Nadie muere de hambre en la Argentina», dijo.

Miguel Ángel Pichetto tomó una decisión: reforzar su perfil en la escena pública a medida que se acercan las elecciones del 27 de octubre. Por eso, lejos de su reconocida prudencia al momento de dar declaraciones, el candidato a vicepresidente de Mauricio Macri realizó una encendida defensa del Gobierno.

«Hablar de hambre en la Argentina me parece una exageración, puede haber un problema, pero es exagerado decir que hay gente que se muere de hambre», dijo como respuesta a las palabras del arzobispo salteño. Y agregó: «Sobreactuó para quedar bien pero el Papa no le pidió tanto«.

El senador rionegrino se refirió a los dichos del arzobispo de Salta, Mario Antonio Cargnello, en ocasión de la participación el domingo del presidente Mauricio Macri de la misa de la Fiesta del Señor y la Virgen del Milagro. Ahí, el sacerdote instó a la dirigencia política a trabajar por los pobres porque «no son una molestia sino una oportunidad».

Y, sobre el final, el padre Cargnello le pidió al Presidente: «Por eso Mauricio, has hablado de la pobreza. Llevate el rostro de los pobres. Son dignos, ¡son argentinos!».

Miguel Ángel Pichetto consideró como una «tontería» el discurso del jefe de la Iglesia de Salta: «El arzobispo carece de la diplomacia vaticana. Fue poco inteligente. Sobreactuó para quedar bien, pero el papa Francisco no le pidió tanto«.

El candidato a vicepresidente de Juntos por el Cambio además consideró que el proyecto de ley de emergencia alimentaria, con media sanción en la Cámara de Diputados, «no es la solución» de la indigencia en la Argentina.

El senador justicialista aseguró, por un lado, que «para crear trabajo hay que crecer», pero, por otro lado, puso como ejemplo a los venezolanos que emigraron de su país por la crisis del régimen de Nicolás Maduro: «Cuando hay voluntad de búsqueda, hay trabajo. Llegaron 400 mil venezolanos de los que 390 mil encontraron trabajo«.