Mar del Plata será una de las ciudades del país en la que se llevarán adelante los ensayos clínicos de la vacuna contra el coronavirus que fue desarrollada por la firma biofarmacéutica china CanSino Biologics Inc. y que impulsa la Fundación Huésped, dirigida por el prestigioso médico infectólogo Pedro Cahn.

La novedad fue confirmada por Ignacio MacKinnon, el director del Instituto de Investigaciones Clínicas que tiene su nueva sede sobre la avenida Colón al 3400. «Creemos que para los primeros días de diciembre podríamos estar incorporando los primeros voluntarios para participar de este estudio», adelantó.

El profesional precisó que, en la ciudad, la investigación abarcará a un universo de 2 mil personas y recordó que los interesados ya pueden sumarse a través de la plataforma online «Un ensayo para mí» (www.unensayoparami.org), en la que también figuran otros estudios enfocados en múltiples enfermedades.

Una vez dentro del sitio web, hay que dirigirse al apartado denominado “Vacunas Covid-19” para poder completar los datos personales básicos que se solicitan en un breve formulario y quedar formalmente inscriptos.

Al igual que la Sputnik V, que esta semana se convirtió en una de las principales apuestas del Gobierno nacional para ponerle fin al drama trágico de la pandemia, la vacuna de CanSino también utiliza vectores virales con adenovirus para inmunizar al coronavirus.

«Es muy parecida pero la ventaja que tiene la que vamos a probar nosotros es que es de una sola dosis, a diferencia de la vacuna rusa y otras más que están en estudio y que se dan en dos dosis distintas», resaltó MacKinnon.

Esta vacuna se encuentra en la fase 3 de las 4 etapas que contempla una investigación de estas características, por lo que el foco de su desarrollo por esta fecha ya está puesto en tratar de demostrar su eficacia para evitar el contagio de la enfermedad.

El ensayo clínico, que tiene como investigador principal al médico Gonzalo Corral, es randomizado, aleatorizado y doble ciego controlado con placebo, con lo cual – sin que exista un conocimiento previo por ninguna de las partes, tanto médico como participante – a la mitad de los voluntarios se les suministrará la vacuna y al resto un placebo.

Entre los requisitos que se exigen para sumarse a este estudio, se pide tener más de 18 años de edad, no haber contraído previamente coronavirus y no estar inmunosuprimido. También se plantea a los sujetos que queden seleccionados que, a los 14 días de de empezar con la participación, no se apliquen ninguna otra vacuna contra la enfermedad en caso de que ya exista.

Para los investigadores que están al frente de este tipo de ensayos, es fundamental poder reunir el número de voluntarios necesario para poder probar de manera segura las vacunas que ya están en una etapa avanzada de evaluación y desarrollo.

El Instituto de Investigaciones Clínicas tiene 14 años de historia en Mar del Plata. Desde entonces, sus profesionales han realizado más de 180 ensayos clínicos con más de 4 mil voluntarios que participaron en diferentes investigaciones en diabetes, enfermedades respiratorias y otras especialidades.