«Nos enviaron fotos de nuestros hijos por WhatsApp», dijo Maximiliano Briz en diálogo con la mañana de Sube.
Hace dos fines de semana una familia fue víctima de la inseguridad luego de que en menos de 48 horas delincuentes ingresaran en dos oportunidades a su comercio de calles 24 y 47.
En la primera ocasión los ladrones destrozaron una puerta de madera y por ello los propietarios decidieron anular esa abertura y levantar una pared. Sin embargo, ese fue el lugar que los delincuentes aprovecharon para realizar un boquete y perpetrar un nuevo robo.
Luego de estos episodios, Maximiliano Briz, propietario de la despensa, radicó la correspondiente denuncia y la Policía inició una investigación que derivó en la realización de un allanamiento en inmediaciones del propio comercio.
Pese a la presencia policial y al avance de la causa, la familia se encuentra atravesando un calvario debido a los mensajes intimidatorios que recibieron en las últimas horas. «Utilizando números de celulares anónimos nos envían fotos de nuestros hijos por WhatsApp. Es realmente muy triste tener que vivir así», se lamentó Maximiliano en diálogo con la mañana de Sube.