Referentes del sector gastronómico en la ciudad analizan por estas horas no habilitar la atención al público en sus locales a partir de las restricciones anunciadas por el Intendente Esteban Reino el pasado domingo.
El Jefe Comunal anticipó que a partir de este lunes tanto bares como cervecerías y restaurantes podrán trabajar hasta las 23 horas, con una ocupación del 50% y sólo con comensales convivientes.
«Poder trabajar con la gente que vive en una misma casa y hasta las 23 nos reduce mucho nuestras posibilidades. No termina siendo conveniente abrir para una porción tan pequeña de público», aseguraron ante la consulta de MB.
Ante este escenario aseguraron que «analizaremos el impacto de la medida durante dos o tres jornadas y, en caso de ser negativo, tendremos que volver a cerrar para manejarnos como lo hicimos durante la parte más dura de la cuarentena».
Desde el sector especulan además con una merma en la cantidad de vecinos que decidan asistir a éstos lugares producto de la escalada de contagios durante la última semana. Al mismo tiempo, desde el Ejecutivo Municipal lanzarán este martes una aplicación móvil con la intención de registrar el ingreso y egreso de vecinos en comercios, edificios públicos y lugares de alta circulación como por ejemplo los locales gastronómicos.