«El problema ya no es el AMBA, se ha diseminado en todo el país», dijo el jefe de Estado al anunciar la extensión del aislamiento hasta el 30 de agosto: «Hace muchos meses la Argentina se olvido de la cuarentena, si no salgan a la calle y vean».
«No hay libertades en juego. Tenemos que tener restricciones para tener cuidado», dijo el mandatario al hablar desde la residencia de Olivos y anunció la prórroga del aislamiento social, preventivo y obligatorio hasta el 30 de agosto «en las zonas rojas volver a la fase 1».
«El problema ya no es el AMBA, se ha diseminado en todo el país», dijo el jefe de Estado al realizar el anuncio desde la residencia de Olivos y agregó: «Hace muchos meses la Argentina se olvido de la cuarentena, si no salgan a la calle y vean». Destacó además la necesidad de «acotar lo máximo posible la circulación y el encuentro con las personas» para evitar la propagación del coronavirus.
Afirmó que «los problemas de contagio ocurren en encuentros sociales» y dijo que «los argentinos que reniegan de estas ideas y realidades deberían escuchar al gobernador de Jujuy», Gerardo Morales, donde «el 93 por ciento del sistema de salud está ocupado».
Además, advirtió que el sistema de salud «empieza a mostrar un grado de ocupación preocupante» en el marco de la pandemia y que el coronavirus «se ha expandido a muchas provincias del país» y que eso hace que «las camas se están empezando a ocupar a otro ritmo«, y remarcó que la causa de ese incremento se encuentra en «la mayor circulación» de personas.