El expresidente de Bolivia, refugiado en México, dialogó con Marcelo Longobardi, y aseguró que renunció porque la derecha lo obligó.
El expresidente de Bolivia Evo Morales denunció la existencia de un golpe de Estado tras las elecciones en su país y aseguró que renunció a su cargo obligado por la derecha. “Me duelen mucho tantos muertos”, lamentó.
“Ganamos en primea vuelta pero hubo una revuelta de la derecha fascista y golpista y para evitar más agresiones a mis hermanos, y para evitar más muertos, renuncié a pedido de la derecha“, manifestó el exmandatario en diálogo con Marcelo Longobardi.
Además, Morales agradeció al presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador por brindarle asilo político y sentenció: “México me salvó la vida”.
Al ser consultado sobre la situación de sus hijos, exiliados en Argentina, Morales aseguró que mantiene contactos con ellos y agradeció al Gobierno por abrirles las puertas del país.
“En Bolivia no hubo fraude, ganamos en primera vuelta, pero pongánse en mi lugar: qué iba a hacer yo sin seguridad, amenazado, con semejante violencia. Mi único delito es haber cambiado nuestra querida Bolivia, hemos demostrado que se puede gobernar con transparencia y con compromiso hacia el pueblo”, aseguró Evo.
Por otro lado, cruzó las teorías que lo responsabilizan de la situación que se desencadenó en su país y aseguró que no tiene “ningún problema” en que en Bolivia “haya nuevas elecciones con nuevos tribunales”.