Una mujer la llamó, se hizo pasar por su sobrina y le dijo que sus dólares iban a cambiar de numeración.

La mujer, de 88 años, vive en Belgrano y fue víctima del «cuento del tío». Una joven, que se hizo pasar por su sobrina, la llamó y le dijo que sus dólares estaban a punto de cambiar de numeración, por lo que debía entregárselos a una persona que iba a poner la situación en regla. La abuela cayó en la trampa y perdió, de un minuto al otro, casi 50 mil dólares.

«No tengo consuelo, no duermo ni de noche ni de día. Tanto ahorré para dejarle algo a mis hijas, llevaba 39 años juntando dinero», sostuvo.

El hombre que se presentó en la puerta de su edificio se hizo llamar Carlos Díaz. La abuela contó que la saludó amablemente y que le dijo que pronto le regresaría el dinero. Para ese entonces la estafa ya había sido consumada.

A las horas Bety llamó a su hija, Adriana, a la que le preguntó por qué no le había avisado que tenía que entregarle los dólares a un hombre. Ante la sorpresa le preguntó qué había hecho y la jubilada le detalló los movimientos. «Mi mamá está devastada emocionalmente. Se siente muy culpable por lo que pasó y por haber entregado la plata que nos iba a dejar cuando ella no estuviera», contó angustiada la mujer.

La abuela colocó cuatro fajos de 10 mil dólares, más un poco de dinero que tenía de una de sus hijas. Todo lo introdujo en un sobre marrón.

La familia realizó la denuncia y la causa ahora está en manos de la Fiscalía Número 27. El próximo martes 6 de agosto tiene que volver a presentarse para ampliar la declaración y aportar las imágenes de las cámaras de seguridad que hay sobre la calle Crámer, donde vive la jubilada, que captaron los movimientos del delincuente que la robó.