Había más de 2.000 monedas y armas entre los restos de un barco del siglo XVIII en Hungría.
La sequía que afectó buena parte de Europa este verano reveló cosas ocultas en la naturaleza desde hace cientos de años. Después de una espada milenaria en Suecia, es un tesoro con 2.000 monedas de oro y plata que fue encontrado entre los restos de un barco del siglo XVIII en Hungría, gracias al nivel excepcionalmente bajo del Danubio.
«Unas 2 000 monedas fueron halladas junto con armas, balas de cañón, espadas y otros tipos de sables«, anunció este jueves Katalin Kovacs, arqueóloga del Centro del Museo Ferenczy de Szentendre, cerca de la capital Budapest, en declaraciones a la agencia de prensa húngara MTI.
El hallazgo tuvo lugar esta semana en Erd, al sur de Budapest, donde los arqueólogos trabajaban sin descanso para obtener un mayor número de objetos antes de que vuelva a subir el nivel del caudal del río.
Como sucede con otros ríos en Europa, el caudal del Danubio se redujo de forma significativa tras una larga sequía en los últimos meses. Su nivel se situó en slos hidrómetros de Budapest en 38 cm, un récord histórico que también afecta a la navegación fluvial.
Entre las monedas halladas, hay ducados y peniques antiguos. «El 90% de las monedas proceden de países extranjeros y datarían del 1630 al 1743», aseguró el arqueólogo Balazs Nagy en la emisora de radio privada Klub. Este precisó que habían sido acuñadas en «Holanda, Francia, Zúrich».
El nivel especialmente bajo del Danubio ya permitió que se descubrieran restos del antiguo puente de Francisco José, destruido durante la Segunda Guerra Mundial, o una bomba estadounidense de este mismo conflicto.
