La iniciativa proyecta integrar el nuevo escuadrón a los que funcionan por aire, tierra y mar. El Gobierno republicano no quiere perderle el rastro a China y Rusia en la carrera intergaláctica.

En una decisión que parece sacada de una película de ciencia ficción, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden para integrar dentro de los Fuerzas Armadas a una nueva división que combatiría «amenazas del espacio exterior».

«Nuestro destino, más allá de la Tierra, no es sólo un asunto de identidad nacional, sino de seguridad nacional», aseguró el mandatario republicano, al confirmar que la Fuerza Espacial de los Estados Unidos será otra rama de las Fuerzas Armadas de ese país.

La directiva de Política Espacial 4 firmada por Trump es la base de la iniciativa legislativa impulsada por el republicano para la creación de este organismo nuevo. Para la Casa Blanca es una estrategia para «garantizar la dominación espacial estadounidense».

La medida reclama al Departamento de Defensa que desarrolle una propuesta legislativa para crear así una sexta rama de las Fuerzas Armadas, que en un principio quedaría bajo mando de la Fuerza Aérea. «Se intenta fortalecer la capacidad de Estados Unidos para competir, disuadir y ganar en un campo cada vez más explorado», señaló el proyecto.

Además, permitirá»organizar, entrenar y equipar a «los combatientes del espacio con capacidades de siguiente generación» y «maximizará la capacidad de guerra y lucha por el espacio mientras se minimiza la burocracia«, apuntó el texto presentado.

Trump sostuvo que el uso del espacio «es necesario para garantizar la seguridad del país, proteger vidas y apoyar el estilo de vida». «La guerra está cambiando y el espacio es ahora un campo de batalla como el aire, la tierra y el mar«, enfatizó.

La creación de esta Fuerza Espacial requiere de la aprobación del Congreso. Trump no quiere perderle el rastro a China y Rusia, los dos países que tienen ramas militares especializadas en el espacio.