La nadadora argentina se llevó tres medallas doradas y se consagró como el gran exponente nacional.
Los Juegos Panamericanos llegaron a su fin y la delegación argentina tuvo una destacada labor, con un histórico medallero. Las 32 medallas de oro, 35 de plata y 34 de bronce no sólo significaron la mejor marca de los últimos años, sino que además mostraron el potencial de los atletas nacionales que pese a no tener un gran financiamiento, terminaron arriba de países como Colombia, que destina gran parte de su presupuesto al deporte.
Delfina Pignatiello fue la abanderada de la delegación en el cierre del evento después de su gran performance en Lima, con tres medallas doradas. La nadadora de 19 años ganó los 400, los 800 y los 1500 metros libre y sacó pasaje para Tokio, en donde deberá mejorar su rendimiento si quiere estar en la mesa de las grandes.
«Me llena de orgullo portar la bandera. No hay nada más lindo y que me haga más feliz que llevar la bandera de Argentina», expresó la atleta de San Isidro.