Según el fallo, el magistrado los procesó por el homicidio doblemente agravado de Lucas «por haber mediado alevosía y por haber sido cometido por miembros de las fuerzas policiales abusando de sus funciones», en concurso ideal con la «tentativa de homicidio agravado por idénticos incisos» de los tres amigos que iban con el adolescente al momento del ataque.
También los consideró «coautores materiales» del delito de «falsedad ideológica» y de la «privación ilegal de la libertad» de los tres chicos que fueron detenidos tras los disparos. Para el juez, la persecución que terminó con el ataque a balazos fue «arbitraria, irracional e ilegal».