El informe de la ONU sobre violencia machista denuncia que al menos 50.000 mujeres murieron a manos de parejas, exparejas o familiares en 2017.
Casi el 60 por ciento de las 87.000 mujeres que fueron asesinadas en 2017 en todo el mundo fue víctima de un crimen machista cometido por sus parejas, exparejas o familiares hombres. Así lo denuncia el informe publicado por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd).
Angela Me, directora de estadísticas de la Onudd, asegura que «no hay duda» de que la principal causa de asesinato de mujeres es el hecho de ser mujeres, lo que se conoce como femicidio.
«Por eso decimos que el sitio más peligroso para la mujer es el hogar«, sentencia Me, una de las responsables del informe «Asesinato de género de mujeres y niñas».
De esas 87.000 mujeres asesinadas, 50.000 (el 58%) fueron víctimas de sus parejas o exparejas, siempre hombres, o familiares, predominadamente hombres, a un ritmo de 137 homicidios al día o seis cada hora. Unas 30.000 fueron víctimas de sus maridos o novios, actuales o pasados.
Para poner en contexto la magnitud del problema, la ONU destaca que, aunque las mujeres son víctimas en solo el 20 % de todos los asesinatos, esa cifra se eleva hasta el 82% cuando se trata de homicidios cometidos dentro de la pareja.
Mientras que el sentimiento de posesión, los celos o el miedo a ser abandonado son algunos de las motivaciones señaladas cuando el hombre es el agresor, las mujeres que asesinan a sus parejas lo hacen en relación a «prolongados periodos sufriendo violencia física«, indica el documento.