Luego del show que brindó en Balcarce, el grupo jujeño dice que vive su mejor momento, maduros musicalmente. Este lunes actúan en Jesús María.
Ya al otro día de haber brindado un show en nuestra ciudad, Los Tekis se instaló en Entre Ríos y empezó a palpitar una nueva presencia en Córdoba. Y así serán las próximas semanas para el grupo jujeño que ya es sinónimo de carnaval y parte fundamental de las grillas festivaleras de cada verano.
“Estamos presentando un show nuevo. Año a año, tratamos de variar la puesta. Si bien seguimos presentando Pachakuti, nuestro último disco, cambiamos muchas cosas. Sobre todo en la parte escénica, donde invertimos y ponemos mucho énfasis. Habrá mucho para ver en las pantallas”, declaró Sebastián López.
-Pasan los años, pero Los Tekis siguen siendo sinónimo de juventud. ¿Sienten el peso del tiempo transcurrido?
-Nos sentimos en nuestro mejor momento. Ha pasado mucho tiempo, muchos años de carrera, ya somos cuarentones y estamos muy maduros musicalmente. Hemos probado muchísimas cosas: un disco más latino, otro más rockero, uno más puro, otro más acústico. Nos jugamos mucho, nos divertimos. Estamos muy seguros en cuanto a la composición. Cada vez que nos subimos al escenario disfrutamos muchísimo. Llegamos a un punto en el que la gente está un poco más calma, respeta, escucha las letras. Y eso se logró con los años, porque al principio Los Tekis eran fiesta, fiesta, fiesta. Hoy la gente se emociona con nosotros, y me parece que eso hace a la maduración de la banda. Siempre hemos hecho una música muy sincera.
“Desde hace casi 27 años llevamos la bandera de lo que es la Pachamama, el respeto y el cuidado de la tierra. Hace mucho que agarramos el estandarte de lo que es el carnaval jujeño, el colorido y la alegría”, agrega. Esa cosmovisión puede verse plasmada en el álbum que editó el grupo en la segunda mitad de 2017 y que contó con la producción de Rafa Arcaute, ganador de varios premios Grammy latinos junto a Calle 13 e Illya Kuryaki & The Valderramas.
-¿Qué balance hacen de Pachakuti hasta el momento?
-Es un disco que, sin querer, suena muy pero muy latinoamericano. Es un disco del mundo, que tiene un vuelo propio muy interesante. Antes de laburar con Rafa tuvimos muchas charlas. Le contamos lo que somos nosotros, lo que representamos, así que no se perdieron nuestros colores tradicionales. Además, hace años que sonamos en varios países andinos y ya empezamos a plantear la carrera hacia esos lugares, y este disco se dio así muy naturalmente. Todo va tomando forma sin que haya una idea muy definida. La Pacha te orienta.
